Sugerencia a los colegas
Olavo de Carvalho
�poca, 17 de Febrero de 2001
�Por qu� nadie entrevista a Ladislav
Bittman,
el
ex-esp�a checo que lo sabe todo sobre 1964?
Millones de ni�os brasile�os, en las escuelas p�blicas, son
adiestrados para repetir que el golpe militar de 1964 fue obra de
Estados Unidos, como parte de un proyecto de endurecimiento general de
la pol�tica exterior yanqui en Am�rica Latina.
�Saben qui�n invent� esa historia y la difundi� por la prensa de este
pa�s? Fue el servicio secreto de Checoslovaquia, que en aquel tiempo
subvencionaba a numerosos periodistas y peri�dicos brasile�os. El jefe
del servicio checo de desinformaci�n,
Ladislav
Bittman, en persona, vino a inspeccionar
las fases finales del ingenioso plan que se llamaba "Operaci�n
Thomas Mann". Ese nombre no alud�a al
novelista, sino al entonces secretario-adjunto de Estado, Thomas A.
Mann, que deb�a pasar como responsable de
una "nueva pol�tica exterior" de incentivo a los golpes de
Estado.
La sinvergonzoner�a fue realizada a trav�s de la distribuci�n an�nima
de documentos falsificados, que la prensa y los pol�ticos brasile�os,
sin la menor comprobaci�n, se tragaron como "pruebas" del
intervencionismo americano. El primer paso fue dado en febrero de
1964: un documento con sello y sobre falsos de la Agencia de
Informaci�n de EUA en Rio de Janeiro, que
resum�a los principios generales de la "nueva pol�tica". La
cosa lleg� a los peri�dicos junto con una carta de un ficticio
funcionario americano an�nimo, que interpretaba, como en las
pel�culas, el papel de h�roe oscuro que, juzgando que "el pueblo
tiene derecho a saber", divulgaba el secreto que sus jefes le
hab�an mandado guardar.
El esc�ndalo estall� con grandes titulares y los planes siniestros
del Sr. Mann fueron denunciados en el
Congreso. El embajador americano desminti� que tales planes
existiesen, pero era tarde: toda la prensa y la intelectualidad
izquierdistas de las Am�ricas ya se hab�an movilizado para confirmar
la patra�a checa. La mentira penetr� tan hondo que, tres d�cadas y
media despu�s, el nombre de Thomas A.
Mann a�n es citado como s�mbolo vivo del
imperialismo intervencionista.
A esa primera falsificaci�n le siguieron varias m�s, para darle
credibilidad, entre ellas una lista de "agentes de la CIA"
infiltrados en los medios diplom�ticos, empresariales y pol�ticos
brasile�os, que circul� por los peri�dicos como de autor�a de un
"Comit� de Lucha Contra el Imperialismo Americano", que
nunca existi� fuera de la cabeza de los agentes checos. En realidad,
ha confesado Bittman, "no conoc�amos
ni un s�lo agente de la CIA en acci�n en Brasil". Pero el montaje
m�s espectacular fue una carta de 15 de abril de 1964, con firma
falsificada de J. Edgar Hoover, en la que
el jefe del FBI felicitaba a su funcionario Thomas
Brady por el �xito de cierta
"operaci�n", que, por el contexto, cualquier lector
identificaba inmediatamente con el golpe que hab�a depuesto a
Jo�o
Goulart."
Toda una bibliograf�a con pretensiones historiogr�ficas, toda una
visi�n de nuestro pasado y unas cuantas docenas de glorias acad�micas
se han construido sobre esos documentos falsos. Bien, el fraude ya ha
sido desenmascarado por uno de sus propios autores, y no fue ayer o
anteayer. Bittman cont� todo en 1985, tras
desertar del servicio secreto checo. Lo que pasa es que hasta hoy esa
confesi�n sigue siendo desconocida por el p�blico brasile�o, bloqueada
por la amalgama de pereza, ignorancia, inter�s y complicidad que ha
transformado a muchos de nuestros periodistas e intelectuales en
agentes de la desinformaci�n checa mucho m�s diligentes de lo que fue
el jefe mismo del servicio checo de desinformaci�n. �Cu�ntos, en esos
medios, no contin�an actuando como si fuese mucho m�s �tico transmitir
a las futuras generaciones, a t�tulo de ciencia hist�rica, la mentira
de la que el propio autor reneg� hace 15 a�os?
Neurosis, dec�a un gran psic�logo que conoc�, es una mentira olvidada
en la que todav�a crees. Redescubrir la verdad sobre 1964 es curar a
Brasil. Entrevistar a Ladislav
Bittman ya ser�a un buen comienzo.